Desde la rama más alta
De mi inhiesto árbol,
Te observo.
No te considero una presa
Digna de acecho;
Ni tan siquiera
Un gusano
Para alimentar las criaturas
Que nacen de mis alas.
Hasta el pequeño yerbajo
Donde ocultas
Tu penosa nimiedad
Será pasto del tiempo;
Olvido para un otoño
Que ni se acordará de su muerte.
Pero quiero que sientas mi presencia;
Que le dediques
Alguna mirada
A mi perfecto plumaje;
A mis perspicaces garras;
A este pico de oro
Que desgarra la rapiña;
Y que me adores
Desde la frustración,
Ese inexpresivo temor
De no poder llegar nunca a mi altura
Aunque trepes por el tronco
O aprendas a volar:
Siempre te angustiará la inseguridad
De la cera en tu espalda.
No te preocupes,
Algún día te dedicaré
Una cagada.
Dedicado a aquellos pequeños seres humanos con aires de grandeza.
Imagen sacada de: https://professor-falken.com/wp-content/uploads/2017/01/aguila-ave-rapaz-alas-envergadura-caza-rama-Fondos-de-Pantalla-HD-professor-falken.com_.jpg
Ja ja, muy buena y gran final. Bravo
Gracias Luna! 😉
Anda que no hay, los hay a patadas, jajajaja, mi.admiración. Besos a tu alma.
Si, por desgracia los hay por todas partes.
Gracias Maria. Un saludito! 😉
😂😂😂 Muy buena dedicatoria!! Un poema genial!! 👌
Un saludo, Littlecat!
Gracias Lidia!
Saluditos para ti! 😉
Genial, estoy de pie aplaudiendo, María del Mar … y riendo.
Jaja! Si, quise darle un toque de humor para que no provocora tanto sentimiento de asco.
Gracias Enrique! 🙂
Muero!! Dedicaremos muchas pues 😛😛
Si, lamentablemente! 😐
😂😂😂 Muy buena!!!! No soporto a estos individuos que se creen más que nadie y viven ecaramados a su ego.
Creo que solo se soportan ellos mismos. Ni entre los de su misma especie…
Saluditos. 😉
Lo leí toda seria. Cuando llegué al final me sorprendí riendo. Ya te vale…
Pues objetivo cumplido! 😀